4 de agosto de 2010

El último peldaño, pesadilla o realidad

Es el último peldaño... pienso, sigo adelante...


Silencio... pasos... oigo pasos, son los míos, resuenan realzando la grandiosidad del espacio, sigo... sombras...  muchas sombras oscuras aunque no negras... murmullos, voces, gente conversando... sigo... el pasillo a la derecha y recto hasta el fondo, entro.

--Buenas tardes!

Nadie... silencio, no del todo, el tic-tac del reloj me sitúa en mi espacio y tiempo, me siento junto a una mesa y espero...
Murmullos, voces... pasos...  humo...

--Buenas tardes!, veo que ya esta aquí, disculpe mi retraso pero se a alargado la reunión y me ha sido imposible acudir antes.
 
--No se preocupe Sr. Jaime, no tengo prisa y siempre aprovecho estos momentos para echar una cabezadita… en fin no tiene mayor importancia, lo realmente importante para mi es la aprobación del proyecto que me motivo tomar esta decisión.

--Sr. Norma, le voy a ser rápido y preciso, hemos estudiado y valorado su solicitud y hemos decidido muy a pesar nuestro denegarle el micro crédito.


Silencio... el tic-tac seguía situándome, aunque había variado el volumen, la relativa pureza ambiental había desaparecido desbordada por la desagradable y espesa humareda del purazo del Sr. Jaime.

--No lo entiendo he seguido todos los trámites y requisitos que se exigen.

--Vera usted Sr. Norma, solo se lo diré una vez y espero que me entienda. El texto de los trámites a seguir, es responsabilidad del departamento de trámites y burocracias varias. Los requisitos están pensados y diseñados por el departamento de complicaciones gratuitas. 


--Pero Sr. Jaime, yo entregue todo lo que ustedes pedían.

--Incorrecto Sr. Norma, si usted mira bien el impreso de los requisitos necesarios observara, que en el apartado 16/4 hay un Asterisco “*17” que le remite al final del capitulo 12 donde usted vera fácilmente un nota con letra pequeñita que dice lo siguiente: (Para que tengan validez estos documentos deberán tener la fecha de entrega de cualquier día de la semana que no acabe con “s”).

--¡Pero oiga usted, yo lo entregue el  sábado por la mañana, lo deje en el buzón!

--Sr. Norma, como usted comprenderá nosotros entre semana apenas trabajamos, no pretenderá que en un día festivo vaya alguien a trabajar exclusivamente para usted, así que a nuestros efectos, sus documentos los recibimos el lunes a las 11 horas que es el momento que le pusieron el sello de entrada y lunes termina con "S".

--Esto es una estafa! Me han hecho perder la ilusión, el tiempo y el poco dinero que tenía.

--Mire usted Sr. Norma le voy a ser sincero, el fin de los requisitos que exigimos no es otro que cribar y desanimar a los interesados en estos proyectos, para que el presupuesto que destinamos a estos menesteres quede prácticamente intacto.

--Es un farsa, una comedia de muy mal gusto, me quejare a sus superiores, para que se enteren con que personal están tratando.

--Puede hacerlo si lo desea, pero tenga en cuenta que ya están al corriente. Estas ideas altruistas de ayudar a la clase necesitada fueron ideadas por nuestros propios superiores, y anunciadas a bombo y platillo en prensa y TV, con el fin de darse a conocer más, de cara a las elecciones.



---Además, todo este papeleo da trabajo a dos departamentos del ministerio, al tener que elaborar estos complicados requisitos, y   finalmente nuestro jurado,  gracias a su ingenio consigue que se lleve a cabo una labor social con coste cero a excepción, claro esta de nuestro salario, que bien nos lo merecemos.


--No me cuente mas Sr. Jaime… creo que voy entendiendo… Sentí un sudor frió que me recorría todo el cuerpo, la estancia desapareció de mis ojos... penumbras ambiguas envolvían mi entorno... voces… me envolvían voces…

--Sr. Norma! Sr. Norma! ¿Se encuentra bien? soy Eufemia su secretaría! esta pálido y empapado de sudor… ¡despierte! menos mal, ¿quiere una manzanilla?


--¡Dios mío! ¡Santo cielo! ¡Por el amor bendito! Me he transpuesto unos momentos y he tenido una pesadilla.

--Sr. Norma con los atracones de comer que se da cada día, es normal que luego le coja modorra...  Por cierto en el despacho de la salita hay un señor,  esperando hace rato, tenía cita para hoy por el asunto de los mini créditos, un tal Sr. Jaime Ciudadano… ¿lo va a recibir?  o prefiere que lo cite para otro día, a usted no le veo con buena cara sería mejor que se fuera a casa o al médico.

Si, Eufemia dile que ha salido un asunto imprevisto, muy urgente y no le puedo atender,  dale cita para otro día, será mejor que me vaya a casa, no me encuentro muy bien.


Texto: Franki
Grabados en negro de: M. C. Escher
Imágenes de Google
Publicado el 09-09-2007 en imaginephotographers por el mismo autor 

27 comentarios:

ma thet zin dijo...

Very nice
Regards

Lydia dijo...

Muy bueno. Lo peor es que esta pesadilla no lo es. O mejor dicho: la realidad es muy semejante a esta pesadilla en tu historia surrealista. Vivimos en una realidad muy absurda, en un sueño de pasos y murmullos, de voces extrañas...

Un abrazo,

V dijo...

¿Y cuando la pesadilla es la realidad? ays... si pudiese uno echarse a dormir y no despertarse, pensará más de alguno por ahí... :( :/

Muy bueno, la verdad.

Un besito, Franki. Bueno, un motón XD!!

María dijo...

Desgraciadamente FRANKI,

tu pesadilla, es la realidad de no se cuantísima gente.

Después de cuatro mil vueltas, burocracia infinita, gestiones y más gestiones, la respuesta es -lo sentimos, no da el perfil de solvencia necesario- Cuando, curiosamente los micro créditos, son para quienes carecen de avales o garantías financieras suficientes que les permitan acudir a los créditos ordinarios, resulta que hasta los pobres, después de marearlos, tienen que acreditar que no los son tanto.

Es lo único que no me casa de tu historia, parece que el Sr Norma, tiene secretaria y come mucho... O ¿se lo estaba pidiendo para otro? ;-)

¡¡me encantan las fotos con las que ilustras la entrada, surrealistas y a cual mejor.


Gracias por esto y por tu visita. :-)

Un besos FRANKI


PD
Yo te concedería el crédito en el acto, que lo sepas;-)

francesc dijo...

María, la pesadilla la tiene el que concede los créditos, en ella se pone en el lugar de Jaime Ciudadano, incluso en la pesadilla toma el nombre de Jaime, el hombre a quien iba a negarle el crédito:).
Quizás es un poco liado jejejeje.
Un beso María

lichazul dijo...

cuanta ácida y mordaz realidad plasmada
ciudadano muchas veces vive en un sueño dentro de otro y allí proliferan mitos y monstruos disfrazados de bur(r)ocracia y timos varios

excelente texto franki
me ha gustado mucho

sin duda siempre la realidad supera la ficción,pero de ella también nacen los héroes:)

besitos de luz

Patricia 333 dijo...

Una historia que tiene mucha verdad

Gracias por compartirla

Besos Franki

Lola Mariné dijo...

lamentablemente, real como la vida misma.
Saludos.

Franziska dijo...

Bueno, querido amigo, veo que en tu bonomía aún crees que determinados individuos pueden sufrir pesadillas aunque sean inducidas por una comida copiosa.

La verdad es mucho más triste. El hombre es capaz de encontrar justificaciones para cualquier cosa por repugnante que sea. De este modo, poco a poco, se pierde la sensibilidad y se justifica lo injustificable.

Ayer, creo que fué ayer, oí hablar a un vigilante de un cierto caso de malos tratos a menores. Este hombre había terminado por denunciar un caso pero, por sus palabras, se dedujo que estuvo años sin hacer nada ante otras situaciones iguales. ¿Cuánto podemos aguantar cuando está en juego nuestro interés personal?

No quiero juzgar a nadie porque cuando llegamos a determinadas situaciones, no sabemos cuál habría sido nuestro comportamiento. A mí me impresionó un libro llamado "El gulap" (no estoy muy segura de que esté bien escrito) en el que el autor al contar su viaje deportado a Siberia, llega a la reflexión de que había sido sólo un caso de suerte que él no estuviera ocupando el puesto del militar que les conducía y que de estar así, seguramente, tampoco él se habría compadecido de los que consideraba eran unos traidores y merecían, por tanto su castigo.

Perdona que me pierda pero todo ha venido en relación con tu relato. Los hombres nos podemos corromper sin advertirlo. Eso es lo que le pasa al personaje de tu cuento.

francesc dijo...

Tienes mucha razón Franziska, en mis años de trabajo he vivido muchas experiencias similares y los protagonistas de uno u otro lado, eran y somos personas normales, si tu quieres, con una gran e ignorada esquizofrenia... eran buenos padres, compañer@s o espos@s y a la vez personajes capaces de participar activamente en cualquier obra Kafkiana. La diferencia esta en que algunos siguen la inercia por miedo o necesidad y otros la marcan. Ha sido un placer leerte por aquí, tus comentarios siempre me enriquecen.
Un abrazo

Luis dijo...

Hola Franki:
Gracias a tu visita he conocido tu blog... y tu última entrada me ha hecho sonreir y al mismo tiempo ver una fotografía de lo que por desgracia nos rodea en nuestra sociedad.
La "burrocracia" ha llegado a unos extremos de verdadera pena y la falta de una serie de valores profesionales es demencial.
Ni los que mandan, ni los que obedecen, somos capaces de solucionar un problema que, desgraciadamente, nos llevará a un rincón sin salida.
Esperemos que salga pronto el sol adecuado!
Un cordial saludo,
Luis

Miguel Schweiz dijo...

Franki, este relato es impresionante ojalá todos pudiéramos tener esas pesadillas…

Referente al Post anterior quería pedirte permiso para enlazarlo en mi blog y una de tus fotos… Yo lo coloco y tú me dices si te parece bien ¿Sí?

Un fuerte abrazo

francesc dijo...

Miguel Schweiz, Hola miguel puedes coger y enlazar lo que desees.
Un abrazo

francesc dijo...

Lydia, Si Lydia, para mi esta pesadilla es muy real, excepto que, los colaboradores que ayudan a que todo sea así, no creo que estos problemas les produzcan pesadillas.
Un abrazo, Lydia

francesc dijo...

Vero, para algunas vivir los sueños es la única forma de vivir una ilusión:)
Un besito, bonita:)

francesc dijo...

Elisa...lichazul, si Elisa estoy de acuerdo contigo, y seguro como tu bien dices, que la realidad muchas veces supera la ficción, aunque esta parezca surrealista y kafkiana.
Un beso Lisa

francesc dijo...

Patricia333, Gracias por tu visita:)
Un beso

francesc dijo...

Lola Mariné, Te agradezco tu comentario Lola.
Saludos

francesc dijo...

Quidquid, Si es verdad, tanto los que mandan como los que obedecemos, tenemos una parte de responsabilidad, unos por llevar el timón hacia no de donde y otros por no plantearnos y exigir a donde queremos ir.
Me ha alegrado recibir tu visita.
Un saludo

antonio dijo...

Los humanos somos retorcidos.
La burocracia se acaba comiendo a los mismos burócratas.

Aceptar un trabajo sabiendo que actuamos mal y disimular con una sonrisa hipócrita ¿por que nos vendemos los humanos?.. me cuesta entenderlo.

Saludos afectuosos!

ojo humano dijo...

Gracias por pasar por mi página.
Aquí es un invierno muy helado y la burocracia, parece, se da en todas partes.
Un saludo desde Chile.

V de Tierra dijo...

Finalmente los que otorgan creditos tambien son personas como nosotros, me pregunto que tan dificil sera para ellos negar y explicar las razones por las cuales no estamos « aptos » para un credito ; porque de otro lado saben que nos rompen las ilusiones.. o es que ya llegan con una mascara y sus frases hechas que repiten a largo de la jornada ? No esta mal eso de que se pongan del otro lado del escritorio para que sepan que se siente. Un saludo !!

LAO dijo...

Algo mas que un sueño. Muy bien relatado. Muchos saludos.

lichazul dijo...

un abrazo y un beso pa'vos
ten una semana genial Franki

con las mejores energías:)

María dijo...

Gracias FRANKI,

te he entendido.

Y ahora que lo has explicado, casi que me da más pena él, que Jaime a quien se lo hiba a denegar...Yo le comprendo, decir un NO, a veces, es más horrible, que recibirlo...
¡¡Aun queda gente con corazón!!
y eso, me encanta.

Un besito Sr. Norma/Franki;-)

María dijo...

Iba, sin "H"
¡¡ay Dios, que desastre soy!!
sorry ;-)

fgiucich dijo...

Más vale comer liviano!!! Abrazos.